“Un simple gesto marca la diferencia. Usa la papelera”, éste es el lema elegido por la empresa pública de Abastecimiento de Aguas y Saneamiento de la Costa del Sol (Acosol), la empresa Hidralia, y el Consistorio manilveño para la Campaña de concienciación contra el mal uso y vertido de las toallitas húmedas e higiénicas, que se ha presentado esta mañana en rueda de prensa por parte del alcalde de Manilva, Mario Jiménez y los responsables de las empresas, Salvador Pérez y Carlos Corral, respectivamente.
Ambas empresas, junto con el Ayuntamiento, quieren señalar los daños que el mal uso de las toallitas provoca en las redes de saneamiento de la ciudad, con el perjuicio que eso supone para los ciudadanos y el medio ambiente, como comentaba el alcalde de Manilva, Mario Jiménez.
Este tipo de campañas de concienciación llegan a un gran número de ciudadanos y sirven para que entre todos colaboremos en cuidar el entorno y apostar por la sostenibilidad.
Entre los mensajes lanzados, la campaña quiere resaltar que las toallitas no son biodegradables. Aunque lo señalen en sus envases, tardan años en descomponerse. La acumulación de sus fibras provoca averías, atascos y roturas en las tuberías, además de grandes daños en estaciones de bombeo y depuradoras.
Un problema, que además de generar un coste para los usuarios y un mal funcionamiento del servicio, supone un grave daño al medio ambiente.
A este asunto también se refería Salvador Pérez, que asistió a la rueda de prensa en representación de Acosol.
La campaña de divulgación y concienciación se difundirá a través de carteles, folletos y elementos publicitarios, para llegar a todos los ciudadanos de Manilva.
Cerca de 17.000 folletos se adjuntarán en el sobre de la factura del servicio de aguas y saneamiento y se repartirán en distintos puntos de la localidad, al igual que la colocación de carteles informativos. Asimismo, también se lanzará una campaña de publicidad principalmente en medios digitales y redes sociales, para llegar al máximo de personas.
El gerente de Hidralia para la comarca, Carlos Corral, indicaba los múltiples perjuicios de depositar las toallitas en el inodoro.
El mensaje principal trata de concienciar a los usuarios de que el inodoro no es una papelera. El retrete sólo debe contener agua y no se debe tirar en él ningún elemento higiénico o cualquier otro residuo. La campaña se centra especialmente en las toallitas, por el uso generalizado de las mismas en este sentido y la conciencia mal generalizada de que su uso en el retrete no tiene consecuencias.