Ante la polémica suscitada por el comunicado de Moto Club Manilva, en el que acusa al Ayuntamiento de impedir que el recinto ferial sea su circuito de entrenamientos, tanto el alcalde, Diego Urieta, como los concejales, Mario Jiménez y Manuel Chaves, quieren salir al paso y puntualizar la medida tomada al respecto. Por una parte, desde el Consistorio manilveño se quiere dejar claro que los
intereses generales siempre van a estas por encima de los particulares y se tiende la mano a todos los colectivos y organizaciones locales para que realicen sus deportes favoritos, actividades o actos.
Los citados responsables municipales, en representación del Equipo de Gobierno, no consideran correcto que se viertan acusaciones públicas, gratuitas y difamatorias dejándose llevar por su afición y sin tener en cuenta al resto de la ciudadanía. Que el alcalde de Manilva, Diego Urieta, como máximo responsable del Ayuntamiento, pretende llegar a una solución intermedia siempre dentro del marco legal y donde prevalezca estar bajo las normativas vigentes de seguridad y nivel de ruidos. Desde el Ayuntamiento se considera que difundir comunicados en las redes sociales para alertar a la ciudadanía y en este caso, poner al sector motero en contra, no es una maniobra coherente ni real, ya que tanto Diego Urieta como Mario Jiménez, presentes en la reunión con el Moto Club Manilva, nunca han negado que estas personas puedan disfrutar del mundo de la moto sino que tienen que ser responsables con sus decisiones y buscar soluciones que satisfagan a todos.
La ciudadanía exige y demanda que la clase política que lo representa trabaje y actúe de forma seria, responsable y rigurosa, ya que si sucede una desgracia y las decisiones adoptadas están fuera del marco de la ley, nadie va a justificar al político que se la ha saltado.
Nadie como este Equipo de Gobierno, y en particular, Diego Urieta y Mario Jiménez, que incluso han sido concejales de Deportes, y el actual edil, Manuel Chaves, han apoyado al deporte en general y al mundo de las motos en particular como ellos, pero la pasión no puede nublar el conocimiento y seguiremos empeñados en buscar soluciones, resaltó el primer edil.
En ningún caso la decisión fue tajante o imperativa, pero se necesita, a través del diálogo de las dos partes, llegar a un entendimiento en el que se insiste, bajo el marco legal, todos puedan estar satisfechos del acuerdo adoptado.