Día de lluvia y barro, en un panorama no antes visto en la localidad, más propio de una película de ciencia ficción que de la Costa del Sol. Las consecuencias de la calima del Sáhara que se asentó en nuestro término municipal dejándonos barro en las fachadas, calles y los coches que hoy colapsan los distintos lavaderos de vehículos existentes en el municipio.
Aún quedan muchos restos de barro y suciedad, y eso que la borrasca Celia ha echado una mano en las tareas de limpieza durante esta madrugada. Hoy con mucho trabajo por delante son muchas las personas que se dedican a adecentar su casa, su terraza o la fachada de los comercios para que todo esté en perfectas condiciones. Y es que desde primera hora de la mañana, los operarios de limpieza contratados por el consistorio se afanan por recobrar la normalidad en las calles del municipio.
Además de las lluvias y el fuerte viento de levante, esta capa convertida en barro ha provocado que las calles y todo el material expuesto se haya manchado.
Los trabajos se desarrollarán durante todo el día en jornadas de mañana y tarde, además de prorrogarse en el tiempo, llegando a todos los rincones del municipio.
Tanto el alcalde, Mario Jiménez, como la concejal de Limpieza, Paqui López, piden paciencia a la población para que se atiendan sus zonas lo antes posible.
Ayer en el Facebook municipal les pedíamos imágenes a nuestros seguidores, hoy despedimos el informativo y lo hacemos precisamente con algunas instantáneas recibidas. Pasen buen fin de semana.